La Chispa
Lo material
Carlos Pajuelo de Arcos
Hace unos días el presidente Rajoy, de vacaciones en el Sur, planteaba la necesidad de pensar menos en lo material y más en lo espiritual.
Pensamiento elevado. Es imprescindible resituarlo, al pensamiento, porque a él ya lo resituaran, si fuera el caso.
Estaba en conocer a Doñana que es Patrimonio de los españoles y de uso restringido, tanto que , al parecer, dispone de un resort para Presidentes en acto de servicio; servicio en vacaciones, porque se sabe que un Presidente e incluso un político de infantería está 24 horas ,día y noche ( en plan lucecita que nunca se apagaba en El Pardo) pensando y sirviendo.
Al ser mitad monje, mitad soldado, como un miembro más de la honorable familia templaria, había que dedicar, dar un toque, al alma hispana. Eso justifica que se apele a lo espiritual como valor que conviene hacer crecer.
Se supone que cuando llaman a la puerta para desahuciarte, digo, o cuando contemplas con frialdad la escasez de alimentos en la nevera, cuando haces números para calcular el coste de libros, colegios etc. tu debes asumir que eso es pura materia o en todo caso ofrecer ese sacrificio A.M.D ( ad major gloriam Dei)
La espada flamígera de la conciencia del Presidente, que lo hace todo por salvar a España de una catástrofe, llenará de orgullo a su entorno y mientras contempla ,digo, las esforzadas maniobras de los atletas en Olímpicos Juegos, muchos se pierden en el asqueroso lodo de lo material.
Hermanos: falta sacrificio. Esos pobres bancarios que tienen limitado a un miserable sueldo de 500.000.- euros (euro arriba, euro abajo) sufren en sus carnes la mordedura de lo material.
Entretanto los engañados por las preferentes deben ir a los bancos duros de las iglesias para rezar, porque sus derechos de engañados sean repuestos y encender velas.
Aquellos que flaqueen en su devoción espiritual deben fustigarse con el cilicio de un Conde que vuelve. Mario está aquí. Honor y gloria a un país que permite que la democracia albergue bajo su paraguas generoso a etarras en tercer grado y a Houdinis bancarios.
¿Si eso no es espiritual, Presidente, dime que lo es? Buenos días.