¿EL MOSTOSO  NACE O SE HACE?

                Hace tiempo que no hablo con mi compañera de profesión Fani y es el caso que ella dice que a mí me pasan muchas cosas en el autobús y siempre le digo que me pasan porque viajo bastante en ellos,  aunque me gustaría hacerlo en uno de esos cruceros de la vuelta al  mundo en plan compañía Cunnard , por ejemplo.

                Obsérvese que no hablo de cruceros de tres al cuarto por 4 duros , respetables pero de 4 duros, no.

                Es el caso que ayer abordé un 81 en hora semipunta y de repente sentí , con la llegada del aire frío del ambiente autobusero,  una “brafada” de olor agrio como de sudor semiseco en el  momento. De inmediato tosí un poco y aproveché para sacarme un pañuelo de emergencia que llevo siempre húmedo en colonia lavanda – un detalle pijo de utilidad y de urgencia pituitaria.

                Calmado ligeramente por mi mundo personal olfativo, acecho con mirada discreta y descubro al individuo mostoso  – ligeramente sucio y pegajoso – pegado a una de las barras de sujeción y bamboleándose en plan gigoló con su camisa blanca de cuello tirando a marrón.

                Este motoso daba el perfil clásico mostosil.

                 Con el pelo pegado sobre su cráneo, con las patillas más largas por donde le había quedado un reguero de sudor seco que era el resto de un pequeño torrente fruto del caloret – que se ha vuelto calorot estos días julianos – llevaba unos pantalones claros en cuya pernera brillaban un par de medallas y más abajo sus deportivas salpicadas de roces de color negros , como huellas de fenazos.

                ¿Hay que llevar uniforme de gala para ir en autobús , haberse dado un baño en un spa al uso y haberse hundido en Hugo Boss  mientras ligeros aromas de menta salen de dientes blanquísimos  al tiempo que te sujetas grácilmente de una barra del bus como si estuvieras en un Pilates de la Calle Colón?

                Yo no pido postureo Fani. Solo digo que hay que lavarse , aunque sea en honor del compañero eventual  que comporta la brusca salida o frenada del transporte urbano.

                ¿Ribó harás un bando al efecto?

                No me importa que la Senyera no entre en la Catedral y que tu no vayas al Te Deum. Lo comprendo por la separación Iglesia Estado etc. pero : ¿ Podrías poner una guardia suiza para evitar al mostoso  y hacerlo lavar? Como si fuera el balcón del Consistorio.

                Por cierto yo mucho mostoso, pero hay unos  lectores que dicen que acentuó mal y que no repaso lo que escribo. Es posible. Yo no soy Gabo – que se hacía corregir , por cierto estos pequeños detalles. Seré bueno y procuraré lavarme y repasar antes de publicar y es que me extiendo con premura y me tengo que contener.

                Lo siento me tengo que bajar ;es una parada antes, pero a este mostoso que lo aguante su primo , por ejemplo.