La lectura, clave para el bienestar de un país. ¡Feliz día del libro!
No hay pueblo más rico que aquel que se llena de libros para leer y vivir experiencias donde desarrollar su imaginación y su conocimiento. La riqueza de un país se debería medir con el capital intelectual, el capital humano que genera y mueve conocimiento. Y en este sentido, no hay día más bello que el Día Internacional del Libro donde todas las librerías y editoriales salen a las calles a exponer tanto sus novedades como sus riquezas literarias.
La lectura es la inoculación más segura contra la ignorancia, por eso el libro ha sido tan perseguido en tantas épocas diferentes de nuestra historia. Cuando leo y veo películas que relatan la quema de libros como el primer de los actos vandálicos de muchas culturas invasoras, nunca he podido evitar un sobrecogimiento atroz, pues es como atacar la libertad de pensamiento, cuna de nuestro conocimiento.
Afortunadamente, desde 1926 se celebra en España el día del libro (Rey Alfonso XIII, decreto del 6 de febrero) a propuesta del valenciano Vicente Clavel, escritor valenciano que cultivo su pasión por la lectura originalmente en la biblioteca de Paterna. En 1916 funda la Editorial Cervantes en la Calle Hernán Cortes, y posteriormente, en 1918, se traslada a Barcelona.
A pesar de haber escrito muchos libros, me sigo considerando un aprendiz de escritor, y por eso, cada día para mi es una evolución y mejora en un arte y disciplina tan hermoso como el de crear de la nada sobre un papel en blanco. Pero incluso más que aprendiz de escritor está por encima de toda mi pasión por la lectura, de hecho, es realmente lo más hermoso creado por el ser humano, donde somos capaces de imaginar y comprender, visualizar y viajar en el tiempo y el espacio. Por eso, hoy es el día de la lectura, de los libros capaces de matar la ignorancia y estimular la imaginación provocando conocimiento y espíritu crítico en las personas. La lectura salva todas las distancias de la falta de diversidad de los pueblos, pues el conocimiento no entiende de blancos, negros o amarillos, de mujeres o de hombres, de heterosexuales u homosexuales, de países occidentales o asiáticos. La lectura de libro permite salvar toda distancia cultural y comprender mejor a los demás a través de los personajes y sus vivencias. La lectura supera afortunadamente muchas de nuestras mediocridades culturales, pues no emite juicios, solo disfruta del saber y conocer.
Por lo tanto, la lectura si la recetamos a diario nos permite mejorar la concentración, reducir el estrés, mejorar la empatía, estimular el espíritu crítico y el conocimiento, fomentar la imaginación, incentivar el respeto cultural, incrementar la autoestima y el respeto por los demás, y un sinfín más de beneficios personales y sociales. Por lo tanto, recetemos en estos días algo de lectura y sobre todo, cuidemos que nuestros niños vivan con pasión la lectura de los libros (en el formato que sea) para que nunca pierdan la capacidad de soñar, principal germen del bienestar de un pueblo.
Quiero cerrar este post con algunas frases célebres que consolidan lo escrito:
¡FELIZ DÍA INTERNACIONAL DEL LIBRO!