17.08.10 – 00:14 –
CARLOS PAJUELO |
Todos, incluidos los que están en la cola del paro, saben que hay diferentes tipos de besos que van del llamado ‘beso seco’, apoyando los labios de uno contra los del otro hasta el beso ‘XT’ apasionado y frenético.
Algunos conocen el beso escultural de Rodin e incluso hay otros que se fijan en el pictórico Klimt, sin descartar a otros que piensan en el de Judas.
Cómo no tenemos otra cosa que hacer y ‘la roja’ ha empatado con México y la Bolsa está bajando y Pepiño rectificando, una revista del mundo rosa ha puesto 45 mil euros, dicen, por un beso. Entreteneos.
Es verano seco y solo han llovido dos besos mediáticos; el gol metido a Carbonero por la vía bucal que la dejó sin habla y la foto principesca del beso robado que ha puesto en casa a un paparazzi.
¿Qué tipos de besos eran? ¿Pensados, espontáneos, toma todo, de lado? ¡Ah! Propongo ese análisis al respetable.
Los expertos que lo estudian todo señalan que hay otro tipo de beso al que llaman ‘espacio-tiempo’ y no es por Einstein, sino porque ha esperado mucho en el horno del cuerpo hasta fraguar y al darse, dicen, genera la sensación de viajar.
Los enanos crecen y se preguntan; no creen en la monarquía y se cuestionan por qué un señor puede heredar un país como quien no quiere la cosa, por mucha Constitución que haya, también se preguntan si ese beso, con sexenio incluido- han tardado seis años, seis, en besarse semipúblicamente-y de lado es una muestra gráfica de la continuidad majestuosa.
Mucha mala leche hay entre el personal, sobre todo en las colas del INEM dónde estos oídos que se comerán la tierra, han captado la palabra ‘montaje’.
Con las medidas de seguridad que tienen. ¿un ‘paparazzi’ de esos, ha robado la foto? «Un huevo, te lo digo yo, chaval», uno a otro en la cola.
Otra, más al loro de las entretelas rosa, señala: «Eso es un aviso a las cuñadas». El que escribe esto, o sea yo, piensa que a lo mejor es algo tan simple como un beso entre dos personas que se quieren. Buenos días