El concepto de autoridad competente pone los pelos de punta a muchos y la declaración de estado de alarma también. Otros sin embargo se frotan las manos como si con ello dieran la bienvenida a un Gobierno que ha despertado de su sueño de posible libertad sin límites y se restaura a si mismo como un fenómeno de recuperación del Estado como máximo y vertical concepto de al pirámide de poder.
Un poco de memoria histórica en este caso nos puede recordar que hay precedentes y la lectura detallada de la Orden que se enmarca en la Ley Orgánica correspondiente en 1981 ( no hace tanto) ilumina los oscuros entresijos de quienes piensan en estados de excepción o golpes inocuos.
El caso de los controladores es un aviso y sí el Estado , sin llegar a la autoridad competente, fuera más Estado y menos autonomía a lo mejor la intervención sería menos necesaria. Bastaría con restaurar la autoridad competente que en su día tenían los llamados “Interventores del Estado”, gente propba y controladora del gasto y avisadora mientras no firmaban de que aquello no estaba o no iba bien.
En EMARSA la depuradora de Pinedo que huele a mierda de corrupción por doquier el dinero corría por encima y debajo de las alcantarillas de la ciudad las firmas autorizando eran la piramide la vergüenza, del todo vale porque el dinero no es de todos. Buenos días.