Como hoy se estudia todo, la Sr. Kidd y otros universitarios han descubierto que el titubeo es una señal y cuando esta se produce el niño está más atento, es una señal de que algo nuevo va a pasar, a decirse y entonces lo aprenden antes.
Si pudiéramos aplicar esta teoría infantil a los adultos estoy seguro que cuando en Tv o en un discurso de duración castrista, alguien titubeara todos estariamos más atentos y entenderíamos mejor lo que dice el que habla.
Y eso para los idiomas debe estar muy bien. Yo llevo intentado hablar inglés , incluso titubeo, desde hace más de 50 años y aquí me tiene usted diciendo “My name es carlos” y mucha gente dirá: Y a mi qué me importa como se llama este tipo. Así que desde ahora y desde que la película “El discurso del rey” ensalza el esfuerzo del tartamudeo y el titubeo , yo a titubear. Ya lo venía haciendo in pectore y es que yo titubeo de todo o sea que no me creo nada y por eso creo que aprendo poco, Son los otros los que tienen que titubear y no yo. Le doy las gracais a la Sra Kid y a sus colegas universitarios por el descubrimiento. Cada día me asombro más.”No estamos diciendo que los padres deban añadir muletillas a su discurso, pero sí que es bueno para ellos saber que utilizar estas pausas verbales es positivo, que estas expresiones de duda son informativas”, explica Celeste Kidd, coautora del estudio.
Al loro entonces. Titubear para aprender más. Buenos días.