Garvey, de 24 años, tiene un contrato con un sex shop por el que cobra 30.000 euros al año. Su función no es otra que probar los prototipos, de toda clase y condición, antes de sacarlos al mercado. Hasta ahora, presume con una sonrisa en las páginas de The Sun de haber testado ya más de 1.000 consoladores y productos eróticos.(fuente: la razón)
Debe ser por la primavera pero he observado una cierta incidencia mayor en los medios por asuntos que tienen que ver con el sexo. La noticia de arriba es un ejemplo y en ese campo la inversión del respetable se dispara incrementándose las ventas en una tasa superior al 10 % anual.
No sé si para ese tipo de trabajo que se realiza en casa hace falta tener vocación o simplemente afición o nada, porque aquí de lo que se trata es de ganarse la vida. A esta señorita la han “tentado” con el lanzamiento de una línea de aparatos eróticos propia y le ofrecen del orden de 150 mil ewuros/ año.
Ya sé que ese salario es inferior al que algunos directivos bancarios levantan- aunque algunos hacen decir que han “recaudado” menos del 9% del año anterior. “Eu que te pego”
Volviendo a “miss juguete erótico” me pregunto yo, si las crisis disparan el entretenimiento sexual. Es el conocido “Folleu, folleu que el mon s´acaba” que he oído por ahí. El frio de estos días, la falta de liquido imponible, el aburrimiento de la Televisión en general, la crisis emocional no positiva que atraviesa el alma de los mortales, puede estar en la causa esencial de la entrega al regocijo en pareja. o no. Supongo que en esto hay de todo.
Si ahora nos enteramos- dice Sonia Valiente que a su vez dice que dicen- que en los gimnasios el ejercicio sitúa a la puerta orgasmástica a ellas, comprese usted una bicicleta estática y a correr que son dos días. Además de mover el corazón y las piernas trabajará usted el entremuslo y a lo mejor su marido,si es el caso, romperá la rutina con usted.
Si no fuera así siempre le quedará intentar cambiar de trabajo como ha hecho la señorita Garvey. Que aproveche. Buenos días.