Ayer una lectora me recriminó el que me metiera en broma con la baronesa, su “pobreza” y su derecho a vender cuadros. Me lo dijo de forma que me llegó al corazón y eso que para llegar al mío hace falta precisión y fuerza, por la cosa de la grasa de la tetilla mía.

¿Que me dijo? Fácil ¿Usted no presume de liberal y de libertad de expresión y de no sé cuantas cosas más?  Si. No tuve más remedio que confesar.

Le dije: lo hice en plan satírico emulando alguna acción leída del pasado,como es el caso de atarse a un árbol, cuando “reinaba ” Gallardón en la ciudad de Madrid, a propósito de querer eliminar algunos árboles del Paseo del Prado para ensanchar la calzada. El caso es que no se quitaron los árboles y aquella acción , medíatica por otra parte, pudiera haber sido convergente con otras y de ahí el relatar por mi con acento chusco.

Es cosa de la envidia. Creo que tengo envidia y por eso ahora pido disculpas públicas a la baronesa , en un por si acaso. Yo creo que la envidia es mala. Solo, eso lo he dicho siempre, envidiaba a los más inteligentes al margen del sexo, color o religión – lo digo en plan constitucional- pero se ve que era un poco mentira. Lo reconozco. Me odio a mi mismo por no tener cuadros que vender y primas blindadas que cobrar.

Por fin me he caído del caballo o he caído en el garlito.  Yo era, como todos creíamos, más rico ayer que hoy y a la marcha que vamos pronto la clase media española pagará un IVA que ni te cuento. Entre el IVA y Montoro amenzando , con cariño, pero amenazando , con un incremento de los impuestos indirectos la sufrida clase media irá lentamente hundiendose en las arenas movedizas de los neoliberales al servicio en su día de Lemans Brother (¿se escribe así?. Se curará del estreñimiento la clase media, porque las noticias remueven el intestino hasta hacerlo fluido.

Usted cree, como yo, que nos están hundiendo para comprar Europa y lo que quede a precio de saldo. Bargains- creo que se dice así a las rebajas “in english-” y oportunidades. Empiezo a apagar las tetulias de radio y televisión porque me producen angustia vital.

Lo que no comprendo es porque me afecta eso a mi. ¿Seguirán pagandonos la “tela” de la pensión? Que al tal Izquierdo de Bancaja o del Banco de Valencia o de dónde sea le paguen del orden de 14 millones de euros por marcharse a casa me da rabia y si ustedes quieren por la cosa moral me parece inmoral ,pero también les digo- somos contradictorios- que me gustaría ser izquierdo y convertirme en “derecho” por mor de la “pasta” cruda y caliente ( cosa compleja fisicamente, por cierto). No somos nada. Yo menos que ayer me vi en bañador. Usaré camiseta larga con la excusa del Sol. Buenos días.