El expresidente de Caja de Ahorros del Mediterráneo, Modesto Crespo, aseguró ayer en la Audiencia Nacional que no planteó objeción alguna a las elevadas retribuciones fijadas en su propio beneficio por la exdirectora general María Dolores Amorós por motivos de igualdad, según fuentes personadas en la causa. Argumentó que sus quejas podían ser consideradas sexistas puesto que Amorós era la única mujer en la dirección  de la caja(fuente: las provincias)

Lo cierto es que yo también amo a las mujeres en general y también en particular. Imaginemos que yo tuviera una, o ella me tuviera mi, que también ocurre o lo que es más interesante aún y es que ambos se tuvieran el uno al otro y que me dijese: “Carlos te voy a poner de retribución- fijate lo demoníaco del tema siendo yo presidente y que mi “directora” me dijese ” te voy a poner” y seguro que me pone- tal cantidad”.

A la vista de la cantidad y sabiendo que estoy en una entidad bancaria y que allí hay mucho dinero repartido entre muchos- un poquito para mi no se nota porque se redistribuye y como son tantos nadie dirá nada- no rechisto ( no sea que se vaya a enfadar y me denuncie por “machista” y ya se sabe como son los medios que enseguida hacen sangre y abren heridas de un granito de nada).

Ay! Modesto,Modesto Pregunta: ¿Y sí hubiera sido menos, bastante menos e incluso una cantidad simbólica por ser solo un cargo de representación? ¿Que hubiera pasado? Discriminación positiva.

No deja de ser, estarán los lectores de acuerdo conmigo, curioso este planteaminto mío. Es mío no de Modesto, al que yo no puedo sino felicitarle por su “sensibilidad sexista”.

La sociedad actúal está muy revuelta y confieso que navego en un mar de dudas y confusiones mil Algo ha pasado que se me han trastocado los valores.En realidad no es cierto del todo lo que digo.Quería decir que estoy a punto de cambiar.

Es la estrofa de la cancíon. “No tengo un delante un infinito así que quiero vivir la vida un poquito” más o menos.

Por favor yo noy sexista y si alguna mujer, estoy por lo individual, desea ponerme un sueldo-con que sea importante, muy importante mejor- yo le prometo que no diré nada, apenas rechistaré.

Vuelve “la caló” y yo retraso mi salida hasta la última hora de la tarde por la cosa de estar más fresco y ponerme  “a la pasa” o sea a mirar con deleite al personal y a ver que dice o hace y venir aquí a cotillear un poco lo que es lo mismo, en este caso, a dar opinión. Buenos días.