Fuera basura
Neurocientíficos del Centro Médico de la Universidad de Rochester (EEUU) han descubierto un sistema de drenaje por el que el cerebro elimina los desechos, según un estudio publicado hoy en Science Translational Medicine, que esperan que tenga aplicación en la investigación del Alzheimer y el Parkinson.
Se trata de una investigación que me abre perspectivas y que va más allá de la realidad orgánica, física, de mejorar el cerebro como sistema.
¿Podrá limpiarse el cerebro de basura neuronal o sea de pensamientos no adecuados? ¿Estamos, estoy, reinventando el llamado “lavado de cerebro” tan ampliamente difundido a raíz de algunas prácticas sobre el particular en prisioneros de guerra o en experimentos semi secretos de algunas organizaciones gubernamentales de algunos países?
Sin duda los estudiosos de la sociología de masas me dirán que esto ya está inventado y no hay más que saber historia o haber leído el origen y desarrollo de alguna ideologías seglares, e incluso religiosas, para acercarse al hecho de que muchos de nosotros no disponemos de un cerebro limpio.
Sin duda eso nos enfrenta a un dilema. ¿Qué es sucio, limpio, bueno y malo? Siendo relativista (gran pecado actual posible) todo es relativo y lo es en función del dónde, cuando, con quién y en que circunstancia.
Por lo tanto es posible que con esto no hagamos nada y solo viajemos al origen. En términos normales no me veo esta mañana en el Hospital pidiendo un lavado de cerebro.
¿Qué sería de los psiquiatras, de la nube de psicólogos, de los columnistas al uso cómo del que esto escribe?
De momento he decidido eliminar texto de mis columnas digitales y reducirlas. Voy a ver si reduzco mis ideas – ¿aún más? Me pregunta mi otro yo- y comprimo como si fuéramos a viajar en una línea de bajo coste (ya sé que lo moderno es decir “low cost” pero, que quiere usted, prefiero el español. Me queda más cerca. Buenos días.