La erección
Es posible que algún lector crea que he sufrido un error en el ordenador y me refería a la elección que tan de moda pactista está. No. Me refiero a la erección del ciclista expulsado de un excursión o manifestación , vaya usted a saber.
Se trata de una excursión de esas que algunos montan para protestar por algo y a las primeras de cambio se despelotan y se suben a una bicicleta y entonces un primerizo en estos lances sufre una erección. Normal. Bien. El Señor lo ha dotado Hosanna!!
En vez de caer los excursionistas nudistas en el embeleso de la autoestima por haber conseguido que un tipo se “ponga” al ver la nalga de A o los pechos B entran , los excursionistas nudistas , en caída libre , dicen tonterías como eso de que se trata de un espectáculo horrible.
Ya será menos podría llegar a pensar el famoso Nacho Vidal de gran éxito en ciertos ambientes por su volumen y longitud.
Por otra parte y considerando el vehículo de transporte es cierto que es una epopeya conseguir esa erección, de la que los medios hablan , subido en una bicicleta cuyo sillín no paree disponer de sendos artilugios que permitan un asiento cómodo a las partes íntimas del erecto.
Puestos a hacer un análisis científico del vehículo de transporte me pregunto si nuestro campeón Alberto Contador hubiera ganado el Giro, como es el caso, despelotado y en contacto directo con el fuerte material que recubre el alma de acero o de lo que sea de lo que este hecho el soporte. Rotundamente creo que no.
Pasear señores y señoras mías en cueros como si de bebés se tratase , bebes un poco creciditos a los que , a lo mejor, por mucha nalga que se tiren a la cara o por mucho pecho o seno de ( iba a decir de Abraham para darle un toque más bíblico pero creo que no debe ser) no consiguen encontrar el camino escrotal porque la cosa se ha acabado.
Es una ecuación literaria falsa esa que dice que todo lo que baja sube. Error matemático en el cálculo de las variables.
Honor y gloria para el expulsado que ha sabido dar el tono en circunstancias adversas para sus partes , dado el tipo de soporte , el sillín ,mencionado. Ahí te quiero ver ciclista universal.
Voy a buscar su identidad , su teléfono, y su dirección y voy a llamarle en nombre de quienes viendo esas excursiones no dan crédito a sus ojos.
No se trata de democracia y del derecho a manifestarse como Dios lo trajo al mundo, no. Me da igual. Lo que me parece indecente es que las mollas grasientas de unas y otros cuelguen hasta casi el manillar y en algunos casos rocen las rodillas en el instante en el que el pedal empuja la palanca pierna hacia arriba y alcanzar el cenit de la redondez esperpéntica.
Un héroe del vigor enviado a casa por envidia. Salve al erecto. Laudes para el valiente. Mucho gusto y buenas noches.