LA DIMISIÓN. UNA EXCEPCIÓN QUE HACE RENACER LA ESPERANZA EN EL DÍA DE SAN BENITO
El hasta ahora portavoz de València en Comú (ValC) y teniente de alcalde del Ayuntamiento de Valencia, Jordi Peris, ha anunciado hoy que dimite de sus cargos en el consistorio y deja su acta de concejal tras las “continuas luchas internas” que, a su juicio, han hecho “fracasar” a este partido. (Fuente: Las provincias)
Una sorpresa y una pena porque el honrado y sincero no abunda. Peris lo era y lo es. Vuelva en paz a su docencia, si eso fuera posible…me refiero a la paz que no sobra en estos tiempos de revuelta y ambición. Dicho queda.
No lo conozco en persona ni en efigie. Una dimisión en España es una noticia. Por eso, ahí va una pequeña laudatio a mi manera.
Me enteré ayer de esa renuncia mientras estaba compartiendo charla, y una rubia y fría cerveza, con un antiguo amigo de esos de toda la vida a los que no hay que dejar de ver, porque son un viaje al pasado y una evidencia de que todavía estamos vivos.
Mi amigo es de mucha estampita y me regala en cuanto lo veo. Ayer la del día era San Benito que, por cierto, entre otras cosas, es invocado para protegerse de las picaduras de las ortigas, del efecto de los venenos, de la erisipela, la fiebre y otras tentaciones mundanas.
Pero héteme aquí que este bendito Benito es mucho patrón; lo es de los archiveros, agricultores, ingenieros curtidores, granjeros y moribundos y mucha profesión más.
Digo yo que aconsejo, por mi cuenta, al Sr. Peris que se dé a este santo que era de mucha paciencia y regla.
De hecho puede haber fracasado lo de en Comú por falta de regla; eso de la reglas es a manera de un muro de contención.
El tal santo puso en marcha, por si acaso, la conocida Regula monasteriorum con sus 73 capítulos y un prologo.
En el mundo de hoy 700 monasterios masculinos y 900 femeninos de confesiones protestantes, luteranos y anglicanos y católicos, claro, siguen funcionando bajo esa regla. Eso no es “moco de pavo”.- Muchas empresas de hoy han encontrado inspiración en ella. Por algo será. Conviene leerla a la sombra.
ºOra et Labora” Peris, ahora para ti y tu casa. Tuteo porque queda mejor en el párrafo. Vuelvo al recatado y educado usted.
Solo como anécdota, ya que me ha dado por San Benito, recordarle que trataron de envenenarle unos díscolos monjes envidiosos. Logró zafarse y fundó Montecassino.
No digo yo que funde usted nada. Sobrevivir es una obligación genética.
Honra usted a sus conciudadanos. Y escribo esto porque es tan escaso, tan poco conocido, el acto de la dimisión que bien merece, me he dicho, una consideración santificable. Muy buenas.