LOS BOMBEROS
Los bomberos de Palma indignados por haber sido excluidos de los rescates en las inundaciones de Sant Llorenç
Los bomberos de Palma han mostrado esta mañana su indignación en las redes sociales porque no han sido movilizados para socorrer a las víctimas de las inundaciones de Sant Llorenç.
En una catástrofe como la que hemos visto y los vecinos de Sant Llorenç han sufrido y cuyas consecuencias pasarán meses hasta ser devuelta la vida cotidiana a su normalidad, nadie sobra a la hora de ayudar.
He visto a Rafa Nadal jugando un partido distinto y sigue siendo número 1 y he oído que ha puesto a la disposición de sus vecinos las instalaciones de su propiedad destinadas a actividades deportivas.
No creo que necesite mayor popularidad y dejar huella de hombre bueno al ir allí a quitar barro y ha ido.
He visto algunas imágenes de máquinas destinadas a evacuar agua paradas en fila india, esperando en los cuarteles de bomberos sin ser usadas.
No lo entiendo. Yo siempre desde muy pequeño, esa época en la que le dices a tus padres y a quien te quiere oír, lo que quieres ser de mayor. Yo quería ser bombero o médico. No soy ni lo uno ni lo otro, mire usted por dónde, pero coincido desde siempre que el ayudar a los demás es una vocación que hemos visto reflejada en las numerosas acciones en nuestro entorno y más allá de nuestras fronteras.
Los protagonistas son médicos, bomberos y otro personal voluntario. Me golpea el alma que, ante las imágenes increíbles de la convergencia de dos corrientes procedentes de las torrenteras que arrasan todo lo que encuentran a su paso, alguien no de la orden o niegue la intervención de un cuerpo experto en catástrofes,
Hombres y mujeres con disciplina, hechos al ejercicio y al peligro, permanecían con todos los voluntarios presentes en sus cuarteles y nada. El Govern tocándose la flauta y esperando la llegada urgente de la UME- un gran contingente que se implantó, con mucho acierto, en el tiempo de Zapatero “el bueno” que fue defendido por Alfonso Guerra desmontando la idea de hombre débil, lo que no quiere decir que estuviera siempre acertado. No sé.