TRADICIONAL AMISTAD
Pese a la tradicional amistad hispano árabe que tanto se ha cacareado por los medios oficiales, antes de que el general Franco existiera, muchas familias españolas tienen una o varias muescas en el alma enterradas en Annual.
Desde la funesta época del dictador Primo de Ribera, y lo pongo tan lejos porque no hay que culpar al presidente actual del problema con ese país. El asunto tiene historia.
Se decía bajarse al moro, muy de moda en su día, y que hacía del país vecino el paraíso del hachís y era, además, una obra teatral de éxito y risa. Ahora no es teatro. Es más, en vez de bajar, sería de” subir del moro”.
El vecino aprovecha cualquier debilidad gubernamental española para reivindicar, actuar a su favor con la certeza de que no pasa nada. Y ahora lo mismo.
Entre la decisión favorecedora de USA en relación con la antigua colonia española y los problemas internos de nuestra España, querida España, Marruecos da un paso más. Es un aviso que se repite con frecuencia histórica.
Mucha frontera europea, mucha declaración, pero los efectivos de seguridad y la población civil ceutí reclaman más atención y recursos y no solo cuando hay peligro.
No obstante, con esta apertura de las puertas fronterizas por parte del vecino marroquí y con la vista puesta en otra parte, los miles de personas que han “invadido” el territorio no han llegado del otro lado de repente.
El martes de esta semana el Gobierno español consignaba una bagatela de 30 millones de euros para atender a la mejora de la vigilancia fronteriza y esa cantidad refuerza otros millones en vehículos, cámaras de vigilancia de todo tipo y, por tanto, se diría que este asunto ceutí es cosa pensada y hecha a conciencia.
Esta nueva marcha, de color diferente a la marcha verde en su día, que sirvió para que el responsable militar de la zona sahariana recibiera, dicen, en un sobre anónimo, las cuatro plumas que, desde el siglo XIX, sirven para llamar cobardes a quienes se retiran sin presentar batalla; unas plumas que están clavadas en el alma de las fuerzas armadas que recibieron órdenes políticas con el general Franco agonizando. ¿Quién agoniza ahora?
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