LA CREDIBILIDAD
LA CREDIBILIDAD
Es el caso que la Biblia lo dice casi todo y cuando no lo dice expresamente se puede interpretar, al menos en este tiempo donde la capacidad de libertad de expresión parece que abarca a casi todo, a casi todo, repito.
Y como ejemplo, aplicado a las últimas horas, tras el indulto colectivo, porque se trata de uno colectivo, he acudido a San Mateo, que lo tengo ahí cerca, para que me eche una mano en esto de decir y ser entendido con pocas palabras.
Dice Mateo: “Por sus frutos los conoceréis. ¿Acaso se recogen uvas de los espinos, o higos de los abrojos?” Una pregunta con respuesta incluida. No. No es posible
Todavía no han pasado demasiadas horas desde el indulto colectivo a los presos de la sedición al Estado y de malversación de caudales públicos (o sea dos cargos diferentes, un dos por uno. Traición y malversación) para exigir más.
Digo Estado y no Gobierno deliberadamente; ambos contextos para explicitar que aquí se han indultado, de momento, dos delitos concentrados en uno. Nos han estafado.
Es decir, nos han dejado cariacontecidos al comprobar la fuerza del Gobierno y la cara dura de los indultados; porque cuando tienen el indulto en el bolsillo, no han pasado segundos, y los gritos de Amnistía ya resuenan como nuevo aguijón con el que pinchar al Gobierno.
Se trata de saber el grado de debilidad que, como dice “el arrepentido” Junqueras, en relación con el indulto, que no hace sino reflejar la falta de fortaleza del Gobierno.
Subido a la grupa de ese caballo los jinetes indultados se crecen.
Y ahora un poco más de Mateo.” Guardaos de los falsos profetas, que vienen a vosotros con vestidos de ovejas, pero por dentro son lobos rapaces.”
Al reflexionar sobre estos acontecimientos y sin necesidad de grandes teorías filosóficas sobre el papel del Estado y del Gobierno, con base en la existente Constitución, me surge el concepto esencial de la credibilidad.
¿Es creíble este Gobierno? ¿Tiene usted afinidades éticas, ideológicas con sus acciones?
Amparados bajo el paraguas democrático cada uno de nosotros tiene la oportunidad de pensar e incluso hacer. Para las elecciones falta mucho tiempo, Es el mismo que para pensar