LA ESTAFA
El núcleo del tipo penal de estafa consiste en el engaño. El sujeto activo del delito se hace entregar un bien patrimonial, por medio del engaño; es decir, haciendo creer la existencia de algo que en realidad no existe.
Estos días hemos leído en torno a una estafa millonaria, realizada por un individuo que ha “levantado” algunos millones de euros, con la parafernalia que montó.
Apariencia adinerada, vivienda alquilada de lujo, contactos de nivel adquisitivo alto, elitista, conseguir la confianza bastante para una relación amistosa “libre de toda sospecha”, como la de un ciudadano ejemplar con éxito en los negocios.
Tras conseguir embaucar a un “primer espada” del entorno, lo demás fluye con cierta rapidez, pero siempre manteniendo cierto secreto que solo comparte con algunos. La red está tendida y así hasta el descubrimiento.
Muchos estafados no han reaccionado mediante la denuncia “ad hoc”, quizás por vergüenza para no ser calificados de “primos”.
Una clásica estafa, posiblemente piramidal cerrada. No son escasas.
Yo creo que las hay más importantes, más sociológicas, más individuos inocentemente engañados.
Tomemos un ejemplo de estos días; lo relaciono con la política, que siendo pan de cada día y muchas veces presente, pese al hartazgo de muchos que se sienten agobiados por las noticias que nos van sirviendo los medios.
Medios que a su vez son “inundados” por las fuentes que están en manos de algunos capaces de poner en marcha algoritmos que condicionan los contenidos. Por no decir que esto siempre es así.
Tras ello hay dos tipos de engaño. Uno el contenido reelaborado y ello en función de intereses económicos; eso que los expertos llaman “monetizar”, y otros intereses ideológicos que inciden en la actitud a tomar por quienes lo consumimos y la credibilidad que se genera forzando, sin darnos casi cuenta, la conducta hacia el consumo o hacia la elección de lideres.
Lideres que una vez elegidos pueden cambiar sobre la marcha. Ya no es posible que nos devuelvan lo consumido o lo votado.
Se trata, por ejemplo, de hacer, dicen que dice, por ejemplo, ahora el presidente en funciones: “Hacer de la necesidad virtud”.
Quizás se trate, no solo en este caso, de la mayor estafa piramidal, en este caso abierta.