.- Bueno, yo quiero que nos veamos con tranquilidad para hablar de lo nuestro… que es muy bonito.
Á. P.- Cuando tú quieras, y te dejen y puedas…Á. P.- Te quiero mucho.C..- Y yo más…(fuentes: el mundo,las provincias)
(…) ¿Debemos tener cuidado con lo que decimos? Supongo que si. Diga lo que quiera mientras lo que diga lo asuma luego y si es un “civil” más.
Yo comprendo que digamos gilipolleces por teléfono y si además es móvil pues usted me dirá. Claro que a lo mejor usted y yo no presidimos-por el momento-la Generalitat.
Muchos hemos leído sobre la existencia desde hace años de una red mundial de escuchas muy sofisticadas y también nos han “fumado” a películas en las que siempre hay un par de tipos de agencias gubernamentales que disponen de aparatos que te ponen al día de lo que hablan determinados sujetos.
El que un señor particular le diga a una señora particular que la quiere mucho y que ella también que lo quiere mucho y que se gustan mucho más ,digo, y que hace las habas como nadie tiene su morbo, pero menos- no me lo nieguen- que un tío le diga a otro que hemos de hablar de lo nuestro, sobre todo si eso nuestro tiene la huella posible de un “arreglito” en el que haya potencialmente dinero por medio, contratos, regalos etc.. No sé. A lo mejor ustedes piensan que no pasa “ná”. Puede que si o puede que no. Contra gustos…
Todo son dudas, pero esas conversaciones dan grima y no terminan de gustar.
Si acaso unas claves para hablar en plan “Le Carré”. Doy pistas.
Uso de terminología verde. “Esta mañana he recibido las coles lombardas que, por cierto están más moradas( ahí puede referirse al color del dinero) que el año anterior. ¿Crees que les falta abono? ( puede querer más guita o no).
Una terminología urbana. La Avda estaba a reventar de circulación.Tener cuidado con los accidentes ( ojo que nos vigilan,por ejemplo)
Una terminología marinera. Habrá viento está semana y debemos dejar el barco en el dique seco ( vamos a parar que la cosa está chunga)
También cabe la posibilidad de no decir nada, de no hablar por teléfono y no prestarse a nada de eso. Es una posibilidad que se hace realidad en muchos políticos y en muchos profesionales que se limitan a cumplir con su obligación y de esos hay muchos.Buenos días.