EL CARTERO NO SIEMPRE LLAMA DOS VECES
La fiscalía pide provisionalmente dos años y medio de prisión para un cartero destinado en la localidad alicantina de San Isidro por no repartir diversa correspondencia que tenía como remitentes a Hacienda, la Dirección General de Tráfico (DGT) o SUMA, entre otros organismos(FUENTE: LAS PROVINCIAS)
Me pregunto si este cartero, que entre 2002 y 2007 dejó de repartir citaciones, multas , avisos de Hacienda etc. se había convertido, motu propio, en un “aliado” del personal al que iban dirigidos los envíos postales.
¿Se trata de un caso del “vengador urbano”, una especie de Capitán América, un Robín Hood postal, que salva a los ciudadanos de recibir cartas o avisos de contenido cuando menos desagradable?
¿Ha sido el Cupido que ha salvado a más de un matrimonio que podría ponerse en peligro cuando ella le preguntase a él: que hacías tu en la carretera de Albacete la madrugada del 6 o del 7? ¿No estabas en Almería viendo a unos clientes?
Este cartero no ha llamado dos veces como en la película de: Jack Nicholson, Jessica Lange, John Colicos, Michael Lerner
EL CARTERO SIEMPRE LLAMA DOS VECES (1981)
Dirección: Bob Rafelson.
Supongo que este cartero no tenía a Jessica Lange a mano, ni una mesa de cocina sobre la que practicar una de las escenas eróticas más llamativas del cine negro.
El intento de asesinato del marido griego de la Sra., Lange da un giro de interés y aquí tenemos una pieza para reflexionar.
Nuestro cartero de la noticia no ha llamado ni una sola vez.
Hay que decir aquí, en aras de la salvación de la distribución carteril o correistica que en mi casa , siempre es en mi casa, suena el timbre de la puerta de la calle y la voz femenina y suave de la cartera- aunque ella dice ,supongo que por costumbre machista el cartero ó porque si a lo mejor dijese la cartera podría sonar a atraco.
Honor y gloria a los carteros rurales y a Mario el cartero de Pablo Neruda que con su bicicleta va y viene hasta la muerte del poeta.
Vuelvo a este del pueblo de San Isidro y me pregunto: ¿Si los destinatarios no han recibido las citaciones, se ha interrumpido la contabilidad del tiempo de las multas, de los avisos “haciendosos”?
¿Qué intenciones habrá albergado la mente del cartero que no ha llamado ni una sola vez? ¿Han sido solo esos avisos y el resto de la correspondencia ha seguido su curso?
Es un caso para Holmes. Lo seguiré.