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Carlos Pajuelo

Pajuelo: la chispa

VENDO MI TUMBA

VENDO MI TUMBA

        Hace unos días me quedé estupefacto al leer el anuncio  de  una inmobiliaria de Aranda del  Duero . El anuncio, situado junto a una tumba  en el cementerio de la localidad decía: “se vende”.

        Leída en su totalidad la noticia, al parecer el “dueño” de la sepultura pensaba incinerarse o mejor que lo incineraran, porque no alcanzo a comprender  como el finado se iba a inmolar en plan protesta budista- cuando se protestaba por la invasión del Tíbet por China, hace de esto algún tiempo ya.

        Hablamos de Aranda del Duero y no de China lo que , en principio sitúa la cuestión en espacios culturales distintos.

        Allí comerán con palillos y en Aranda, según dicen la guías que yo confirmo en alguna de las especialidades se come con cuchara y tenedor a dos carrillos.

        Se dice que la tradicional matanza proporciona abundantes ejemplos de procesado de la carne de cerdo en embutidos tales como la morcilla de Burgos.6 Se compone básicamente de cebollasangremanteca y arroz, a la que se añaden otros componentes. La tradición oral reza que debe ser: «sosa, grasosa y picajosa».

        ¿Querrá el supuesto vendedor cambia tumba por morcilla?

        En China, por cierto, el culto a los muertos es sagrado y los antepasados son importantes y respetada su memoria.

        Aquí regular tirando a mal, pese a que dentro de unos días la Policía Municipal tenga que ordenar el tráfico por la visita anual a los cementerios.

        Mucha flor y poco respeto el resto del  año. Si ya sé que hay caso y casos….pero como decía mi suegro: ” lo que sea en vida”.

        Surgen varios problemas en relación con este asunto. ¿Son las tumbas o los nichos o los panteones propiedad de uno y por tanto vendibles, traspasables o alquilables?

                No hay derecho funerario, dicen. Lo que hay es una concesión `por un máximo de años y por tanto las concesiones no se pueden vender, me señalan los que he consultado.

         Imaginemos por un momento que se pudieran alquilar o ceder, sin que mediara notificación alguna a quien ostente la titularidad (parroquia o municipio) y fuera uno al llamado camposanto y fuera con el posible o potencial inquilino.

         ¿Que hacemos con los restos que encontremos allí? ¿Se podría considerar un delito el recoger los restos y llevarlos a otro sitio? ¿Podríamos ser objeto de persecución policial por profanación?

         Ojo. Si usted ha pensado en vender, traspasar o alquilar la tumba de su padre de usted, de su abuela o del finado en la guerra carlista de turno, piénselo. No vayamos a tener la fiesta en paz y acabe, en primera instancia, con sus huesos en el calabozo para ir abriendo boca.

         Cruzo los dedos e informo que no tengo parcela en vida para mis restos. En la calle no me van a dejar…creo. Buenos, venturosos y vivos días

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Por Carlos Pajuelo

Sobre el autor

Profesor emérito Universidad, escritor , publicitario y periodista. Bastante respetuoso con los otros. Noto la muy mayoría de edad física. Siempre me acuerdo de aquello de "las horas hieren y la última mata" y para aquel que trate de averiguar que significa esto ; cada uno que crea y piense lo que quiera


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