PANDEMITIS.DIARIO DE UN ENCIERRO

Pues no. Esto no se ha acabado. Hay mucha gente agrupada en Comunidad y dirigida por políticos que no les llega el agua al cuello, abrumados, y es natural, porque el comercio no va y tienen miedo a que si estalla un ligero conflicto social, que es como una llama pequeñita al principio de un incendio, que la cosa se propague y ellos acaben braseados.

Si hay que abrir se abre pase lo que pase. Y mientras el carro vaya yo voy en él. Madre del amor hermoso que dicen algunos. Si me quedo sin cargo que hago yo ahí afuera, con lo difícil que está todo. La verdad nada.

Como hablo con mucha gente, por vía telefónica, noto que el personal está ansioso, algunos en autentico ataque de pánico y otros sin saber si habrá o no pronto “corralito”, entre ellos yo.

Digo que tengo pandemitis porque a mí me pasan cosas raras, o no tanto, de tal suerte que todo lo atribuyo a la pandemia. Veamos. Ahora mismo son las 4,20- eso que llaman la “madrugá” y me duele un costado un poco, es un dolor leve pero molesto y se sitúa a la altura de la quinta costilla izquierda y llevado de mi optimismo circulante me digo: ya está aquí es, el principio del corona y eso que la prueba que me hice, en plan privado, me dio negativo y claro no tenía anticuerpos lo que demuestra, dicen, que no lo he pasado. Y los anticuerpos no los venden ni en El Corte Inglés. No somos nada,

A veces me pasa como a mi santo padre y sé que a otros de mi provecta cronología les pasa lo mismo.

Se trata de un intento, a sabiendas, de evitar a los informativos de cualquier cadena, a los programas matiners que se retroalimentan desde que alguien habló de la existencia del corona allá por los primeros muertos en China, en Italia, en Corea y en Madrid.

Han convertido la noticia en “el día de la marmota”. Alabado sea el Señor.

Hay que evitarlo Carlos para no caer en manos de la crisis que mantiene paralizado al respetable y permite que nuestro amado líder avance con decreto en ristre cada 48 horas, menos que un plazo judicial de cuando funcionaba la Justicia, . Cosas.

El caso es que ayer en un intento de evasión televisiva me dedique- perdón pero es verdad- a leer a Nietzsche y cuando me di cuenta de que yo no era el superhombre al que él y que tanto estaba de acuerdo con su visión de las mujeres probablemente influenciado , quizás por su admirado Arthur Schopenhauer , me pase a la biografía del general Varela- escrita por mi amigo el profesor Martínez Roda que demuestra que era el general más abierto, dentro de lo que cabe, a Europa y a un cambio.

Volví a la televisión y me puse un programa de viajes “Viajar” y debo señalar aquí que me quedé dormido en México y me desperté viendo Escocia desde el aire.

Había logrado una noche más dejar de lado a Sánchez el doctorado líder a un lado y al veloz Casado- el hombre más rápido haciendo carrera y máster-. Estando todavía caliente el hueco del sofá me di cuenta que casi no podía andar y mi cerebro volvió al corona “ya está aquí”, pero no. Hice unos ejercicios que me había recomendado mi mujer, que a su vez los había recibido de su amiga Inma y pasado un rato volví en mí. Es justo en ese instante cuando me acordé de Santa Teresa por aquello de “vivo sin vivir en mí”.

El caso es que siempre que pienso en esta santa tan inquieta que decía que Dios también se encontraba entre las cacerolas (no se sabe si ella llegó a estar entre cacerolas o era para dar ánimos) pienso en San Juan de la Cruz y mantengo la teoría humana, natural y nada pandemita de que él le tenía un especial aprecio.

No desbarro aunque es posible que la hora en la que escribo esto tenga algo que ver. Espero que el lector sepa apreciar esa mínima cuestión y sepa perdonar a esta alma mía tan inquieta y sorpresiva en sí misma.

Pensando en el dormir pienso, mire usted por donde, en el hombre que tiene el mando único, el que nos dijo que no dormiría tranquilo teniendo al Sr. Iglesias en su gobierno, pues mire usted…lo tiene y digo yo que si no duerme ahora como yo; ¿No estará elucubrando él como metérnosla doblada y darle un bocado a las pensiones? Maldición. Ese pensamiento me ha despertado del todo. Me voy a asomar al balcón a ver si veo a esa Luna que dicen que es flor o de sangre. O vaya usted a saber pero que es única.

Me he asomado y solo la adivino porque está en un sitio detrás de un edificio que me la tapa, solo veo una luminosidad más blanca pero nada más. Somos buenos en España, Nos confórmanos, hasta ahora, con casi nada.

Y ahí están los aplausos balconeros. ¿Creerá Ábalos, por ejemplo, que son para animar al maxi gobierno de coalición?

Ya me voy. Antes una cosa. ¿Por qué la Sra. Arrimadas se destaca con un sí de sus diputados al líder en minoría progresiva?

Ya me voy pero antes una cosa más. ¿Los ex presidentes no pueden “rejuntarse” y dar un golpe de timón para espabilar y poner en cuarentena a estos señores que me ponen al frente de la reconstrucción al vasco Patxi que lleva en el partido desde los 16 “tacos” y no le ha dado tiempo a terminar su carrera? Leo que en Italia también han elegido a D. Vittorio un Jefe muy puesto y ex CEO de empresas multinacionales. No entiendo nada.

Yo creo que estoy afectado por un poco del Corona. He perdido un poco de olfato que como se sabe es un síntoma pre coronario. ¿Se sabe algo del Rey? ¿Estará bien? Hasta luego.