TOREROS, FUTBOLISTAS Y MOTORISTAS
El asunto del corredor de motos Márquez me tiene atrapado en el sillón bol con un dolor de riñones de importancia crucial, para mi claro, porque yo ya sé que, al prójimo, el que a mí me duelen los riñones le importa un higa y yo lo comprendo porque me pasa lo mismo.
Vi la grabación en la que el motorista e por los aires e incluso la moto, en plan vengativo, le golpea cuando está en el suelo y acabo de leer que el húmero que tenía roto no le impide volver a correr el domingo.
No sé qué han hecho con él. No creo que le hayan puesto uno nuevo (a punto he estado de llamar al Doctor Cavadas, por si había sido él), pero no, el humero es el mismo que tenía y la noticia daba cuenta del permiso que le han dado para correr el domingo en Jerez.
Increíble y yo aquí tirado por una molestia que llevo tratando desde el día de Reyes pasado- por poner una fecha.
Y eso que no les hablo de como tengo mi sagrado escroto al ver las dificultades de aceptar que estamos en un rebrote y sin contar la reunión de la ministra de Exteriores con el primer ministro Picardo de Gibraltar, dando a la cosa un aspecto bilateral que huele mal o sigue oliendo mal desde el siglo XVIII.
Ahí el Sr, Sánchez tiene una oportunidad de convocarnos, como en su día Franco, (con permiso) con aquello de Gibraltar español. No somos nada.
No lo seré yo, pero Márquez es de hierro o de acero inoxidable como los toreros con sus cogidas impresionantes y no me refiero al affaire del Sr. Ponce con su nuevo amor. Me refiero a las heridas que parecían mortales y a los 15 días o un mes ya están en la finca correspondiente dándose unos pases que ni Manolete.
Y también tenemos el caso de algún futbolista que, tras una espectacular caída con golpe en la cabeza, las atenciones a pie de campo por los servicios sanitarios y una pasadita por el quirófano, sí es el caso, de nuevo al campo.
Héroes de hierro, tatuados algunos hasta las cejas, que dan opiniones, sobre todo, como yo, por ejemplo, y se quedan tan anchos al repetir quince veces el “bueno” como apoyo lingüístico
¿Comen algo especial? ¿Disponen de secretos esotéricos que los hacen así? ¿Son masones- ahora que está de moda el asunto por la ceremonia de homenaje de la semana pasada en el patio del Palacio Real? ¿Son los últimos descendientes de los templarios y son mitad curas y mitad soldados? Esto último creo que no, pero…
Lo siento me tengo que retirar de la columna par atender a la mía física, que me da un pinchazo.
No soy nada como he dicho al principio y ahora lo repito para que no tengan duda y me digan cosas o me den consejos. Los tengo todos, gracias. Me voy a aplicar calor que unos dicen que es bueno y otros que no tanto, que aconsejan hacerse el muerto en el mar que relaja mucho. No me atrevo.
Ese entrenamiento me da mala espina o como dicen ahora me da “mal rollo” esa movida.. Hasta mañana si acaso.