La muerte del actor Aleixandre me ha conmovido. Sus años no le han impedido mostrarse hasta el final tierno. Su voz casi trémula se ha quedad0 en el aire de la memoria y como señalaba un director, para cuyas películas había trabajado, con él se cierra el el cine español de blanco y negro.
Yo siempre lo recuerdo acompañando a Lopez Vazquez y a otros muchos interpretando historias de una especie de neorrealismo a la española. Creo que está pendiente una tesis que hable de los secundarios en el cine y su aportación.
Por eso afirmo que nadie es secundario. El principal rol personal es el vivir cada día. En ese papel nadie nos sustituye y cuando ese papel se proyecta sobre los demás, amigos, familia etc el papel pasa a ser principal.
Habrá quien diga “mandan sobre mi”. Claro y así ocurre en la organización social y todos, incluso el que nos manda, dependen de otro.
No caiga usted en depresión por creer que es usted un secundario. Ha costado mucha sangre ser libre para que ahora” me caiga” usted en una depre. Nadie es más que usted. Muerte a la envidia.
Descanse en paz Manuel Aleixandre. Yo lo tengo en cuenta y sus actuaciones alcanzan niveles de ternura muy apreciables. Buenos días.