LA CHISPA
El Día
Carlos Pajuelo de Arcos
Es el caso que hoy me ha tocado columna y coincide con el Día de la Mujer Trabajadora, creo.
El decir aquí creo supone someterme a la crítica de quienes dicen que como parece que me he olvidado o tengo dudas, el asunto adquiere tintes de machista, lo que no es cierto. Nada cierto, por cierto.
Lo que me parece indigno es que tenga que haber un día para esta u otras, por cierto, conmemoraciones. Se es niño, mujer u hombre con las diferencias propias de edad y género, que se dice ahora, aunque yo prefiero llamar a esto sexo, me refiero, claro, a la mujer y a su diferencia con nosotros los hombres, una bendita diferencia, si me lo permiten. Bien. A lo que iba.
Se venden azulejos “socarrats” dónde se puede leer:“Amiga sincera,leal,franca,verdadera,afectuosa,única,constante,buena,prudente,consejera,y sabia. Esa es tu madre. No lo dudes”
Bueno. Está bien todo eso. Ya se sabe que madre no hay más que una y “La Belén” dice: Yo ma to. Se refiere a su hija. Puede ser homicidio y matar no está bien.
La cola llegaba hasta la esquina en un día cualquiera de la posguerra, cuando mi madre formaba parte de esa cola para traerme leche y se pasaba horas; podía no haberlo hecho. ¿No?
Me aconsejaba fatal, luego se ha visto, porque quería que yo fuera banquero o sea bancario- no es lo mismo ser March que trabajar para él.
No era prudente a la vista de las broncas que tenía con mi padre. Era monárquica y eso no sé todavía si es prudente.
Constante sí. Como la crisis era el pan negro de cada día había adquirido la costumbre de buscar el céntimo, hoy sería el euro, allí donde estuviera para ahórraselo.. Era una adelantada al tiempo de hoy en materia de austeridad.
Cosía para la casa y se jodió parte de la vista y para entonces ese asunto de la operación de cataratas no lo veíamos claro.
Yo he tenido suerte con las mujeres de mi vida y digo por orden de antigüedad mi abuela, mi madre, mi mujer. Yo no creo que necesiten un día sino una vida. Bien ¿No?.Buenos días.