Los malsanos creadores de virus, malware y otra bazofia tecnológica, no paran quietos. Y allá donde está el mayor filón es donde ponen sus caninos e insaciables ojos. El último damnificado es Angry Birds. Si no lo conocen (permítanme que lo dude), les resumo el juego. Se trata de manejar unos pajarracos con un tirachinas gigante para derribar una estructura en la que se ocultan cerdos, otros pájaros, monos y otros seres vivos que ríen burlones si no logras tu objetivo. Fin del resumen. Ni grandes gráficos ni grandes despliegues. Pero brutalmente adictivo. Ya hay gente LITERALMENTE ENGANCHADA. Imaginen que toda Europa se descargara el jueguecito en cuestión. No lo imaginen. Es así. Durante 2011, la aplicación más comprada de la historia superó los 700 millones de descargas. Más que los habitantes del viejo continente. Su última versión, Angry Birds Space, logró 1o millones de descargas… tres días después de su lanzamiento. Hagan cuentas: solo teniendo en cuenta los 0,79 euros que vale la app en la App Store, estaríamos hablando de ocho millones de ingresos brutos… en tres días.
Y los piratas no lo han pasado por alto. Si usted tiene un móvil Android, se ha descargado recientemente la última versión del juego y ha recibido en su última factura una cifra extrañamente alta, ¡ojito! La propia empresa responsable de la app, Rovio, ha avisado en su blog de la existencia de un virus troyano que permite controlar en la distancia el móvil que se descarga el falso Angry Birds creyendo que es el auténtico y genuino. Vamos, que uno cree estar preparando su smartphone para disfrutar con los parajillos y acaba comprobando que le ha abierto la puerta de su móvil a un pajarraco. Porque con el malware en el teléfono, los piratas logran el control remoto del mismo e incluso pueden hacer que este se conecte a páginas web y servicios telefónicos de tarificación adicional. Y las tarifas de datos, pues van que vuelan… Si quieren una descripción más técnica del troyano en cuestión, aquí tienen el enlace al blog de Sophos, la firma de investigación tecnológica que ha firmado uno de los avisos.
La solución, según Rovio, que obviamente no quiere que se estropee su ‘pajarita de los huevos de oro’, descargar Angry Birds desde el sitio original de Google. Si buscamos atajos, podemos acabar perdidos…
Por si se animan (o aún no lo han hecho) un simpático tráiler de los pajarillos. Preparen su autocontrol ante la adicción…