Moda y discapacidad se dan la mano en la segunda edición de la Pasarela Alma
Una pasarela de moda suele ser un centro de reunión en el que un grupo de diseñadores presenta las últimas colecciones de su marca. Pero, ayer, en l’Auditori Torrent, se celebró un desfile completamente diferente. Allí, a mediodía, tuvo lugar la segunda edición de la Pasarela Solidaria Alma, que congregó a varios diseñadores de renombre. Pero éstos, por un momento, no fueron los protagonistas. Quien se llevó el cariño, los aplausos y el reconocimiento de todos los asistentes fue la Fundación Aixec, una entidad cuyos fines sociales son la atención a las personas con parálisis cerebral y a sus familias, y a la que iba destinada toda la recaudación.
Un año más, la moda y la discapacidad fueron de la mano en un desfile integrador formado por modelos profesionales y discapacitados favoreciendo, de esta forma, la presencia de su capacidad. El evento comenzó con las palabras del periodista Fernando Delgado y de la madrina del mismo, Alba Dominguín (que acudió acompañada por su madre, Paola). Ambas, como dos gotas de agua.
La gala continuó con un Cant d’Alba, así como con la música medieval de Capella de Ministrers. Pero el momento más emotivo de la mañana fue, sin duda, un espectáculo de danza escénica organizado por un grupo de discapacitados pertenecientes al grupo Aixec Moments Art. Ellos fueron los encargados de abrir la pasarela, en la que participaron, de forma desinteresada, Porfin!, Dolores Cortes, Tonuca, Nona, José Zambrano, Jaime Piquer, Paco Fortea, Siglo Cero, Miquel Suay, Javier Larraínzar, Juan Andrés Mompó y Francis Montesions, que puso el broche de oro con un espectacular traje de novia. Eugenio Reyes, ideólogo de la pasarela, también se apuntó a la fiesta y paseó por el escenario, elegante, con uno de los diseños del valenciano.
Y si ellos se llevaron todos los aplausos, los que lograron hacer levantar de los asientos al público fueron Presuntos Implicados, que acudieron a la gala para ofrecer un mini concierto acústico y apoyar también, así, a la causa. «Cómo hemos cambiado», «Todas las flores» o «Fallen» lograron hacer cantar al respetable. ¡Incluso a mí!
Veladas como ésta ponen de manifiesto que la solidaridad nunca pasa de moda.