Alfredo Esteve  y su hermana Roseta, clavarios mayores de la pila de San Vicente

Roseta y Alfredo Esteve con Mayrén Beneyto, anoche. / Juan J. Monzó

Me atrevo a confesar que el de ayer, sin duda, fue uno de los días más importantes y emotivos del empresario de moda masculina Alfredo Esteve y el de su hermana Roseta. Una de esas noches que tardas en olvidar y que recuerdas constantemente con una amplia sonrisa en la cara. Ambos fueron nombrados clavarios mayores de la Pila de San Vicente, en el mágico entorno del Paraninfo de la Universitat de València.

El acto comenzó con la actuación de la Coral  Polifónica Valentina y las palabras de la concejal de Cultura, Mayrén Beneyto, que ejerció, con la elegancia que le caracteriza, el papel de mantenedora. Subida a unos zapatos de tacón y con un vestido negro, Beneyto recordó el amor que los dos hermanos sienten por Valencia.

Momentos previos a la celebración, Esteve me confesó estar «atacado y algo nervioso» y me dijo que seguro que le caerían algunas lagrimitas. Y vaya, las lagrimitas me cayeron hasta a mí. Alfredo estuvo constantemente pendiente de su hermana Roseta. Ambos escucharon el cariñoso parlamento de Mayrén cogidos de la mano. Por cierto, mientras Beneyto recordaba citas de San Vicente y su relación con la ciudad se le cayó el micro: «No cabe de que esto es cosa del diablo», bromeó la concejal, que ya había avisado que se hallaba casi tan nerviosa como los protagonistas.

Pero la noche no acabó con la imposición de las medallas bendecidas por el obispo de Valencia, Enrique Benavent, a los dos protagonistas. Alfredo y Roseta no dudaron en rodearse de amigos para celebrar este «gran» acontecimiento. Así que acabado el acto, que duró dos horas, todos se marcharon al restaurante La Embajada donde disfrutaron de una suculenta cena.

Allí se reunieron, entre otros, el pintor Enrique Senís, que retrató a Roseta cuando fue Regina dels Jocs Florals hace tres años; el presidente de Lo Rat Penat, Enric Esteve; el alcalde de Meliana, Blas L. Devis; una representación de la falla Pizarro de Valencia y l’Armonia de Meliana, de donde Roseta es fallera honorífica; el presidente de la Pila de San Vicente, Luis Torres; Pepe Boix, de la Junta Central Fallera; la indumentarista Amparo Fabra o matrimonios como los señores de Vila, Granell o Romero, entre otros.

¡Se me olvidaba!, Esteve me contó orgulloso que, desde el 29 de abril y durante un año, tendrá a la figura del santo en su casa. Justo el mismo día en el que en Meliana, de donde es oriundo, le pondrán a un parque el nombre de su hermana. ¡Felicidades!