Sábanas de seda, spa y otros lujos de volar en primera
Admito que hasta hace poco pensaba que la primera clase eran butacas convertibles en camas, menús exclusivos y derecho a facturar kilos y kilos de equipaje. Me equivocaba. Hoy es mucho más que eso: habitaciones privadas, sábanas de seda, barras de bar, baños más grandes que el de muchas casas y, atención, ¡hasta Spa! La entrada […]