Solo parece que hay un mensaje claro que todo ciudadano percibe ante la nulidad y parálisis política, y es ¡buscarse la vida! Porque si algo tenemos claro estos días de incertidumbre es que nadie habla del empleo ni de la necesidad de mejorar las competencias y empleabilidad de los profesionales.
En efecto, y todos los sabemos bien, nadie nos va a “sacar las castañas del fuego”, el día a día aprisiona al desempleado, mientras ve el marasmo político y la ausencia de medidas que fomenten un mayor empleo y una mejora de la empleabilidad.
Y es que no pedimos que “papa gobierno” nos solucione todo, sencillamente necesitamos una mayor “obsesión” por el empleo, una preocupación constante por el chorro de jóvenes que se nos van diariamente y por los profesionales que llevan en el desempleo estancado durante años.
No hay más remedio, tendremos que seguir buscándonos la vida como siempre. Y para eso, más que nunca reflexionar sobre nuestra empleabilidad, nuestro valor actual en el mercado y las oportunidades que tenemos en el sector en el que estamos.
Pero no ceje en el empeño, a pesar de las batallas perdidas diarias, la esperanza es lo último que se pierde, y hoy más que nunca hay que ser estratégico sobre su empleabilidad y amigo de sus amigos para buscar oportunidades de empleo.