Cada vez más la educación está necesitada de una modernización no solo tecnológica sino sobre todo de mentalidades. Y es que parece que aun estemos en el siglo XX cuando miramos la mayoría de modelos educativos. Por supuesto, siempre hay excepciones, pero no hay más que ver las propuestas políticas para comprobar su inadecuación y su falta de perspectiva. No hay “material” más frágil de un país que la educación, ni semilla más importante que la cultura. Sin embargo, como si se tratara de un “paquete” normal se le suele tratar con vaivenes continuos que perjudican el alcance de los objetivos. La educación no es un objetivo a corto plazo, es mucho más que eso, y sin embargo la suelen tratar de modo superficial y carente de perspectiva. Y es que los que vivimos la educación en el día a día echamos de menos una clara estrategia compartida y consensuada. ¿Alguien duda que los que más pueden aportar son los mismos profesionales? Parece, hasta el momento, que este no es el abordaje.
Cuando en otros países hablamos de la modernización de las administraciones y de todos los sistemas, aquí por modernizar entendemos cambiar el ordenador por uno nuevo. Pero los cambios tecnológicos no sirven de nada si no lo acompañan cambios de mentalidades.
Si hablamos de experiencias innovadoras en el aula, sistemas de participación, desarrollo cognitivo y mapas mentales, mentalidad crítica, coaching educativo y un sinfín más de técnicas y abordajes de nuestra modernidad, parece que todo eso es ajeno a nosotros. Salvo casos excepcionales afortunadamente.
En este sentido, hoy nos hemos reunido en Madrid cuatro ponentes que tenemos mucho que decir en la educación y hemos compartido la mesa de conferencias del seminario de Coaching Educativo organizado por la asociación nacional de más prestigio en este campo AECOPE (www.aecope.com). El orden de las conferencias ha sido: Juan Carlos Cubeiro (nuestro gran experto nacional en gestión del talento), Elsa Punset (nuestra prestigiosa experta en Inteligencia Emocional) , Roberto Luna y Carmen Pellicer (nuestra experta en coaching e innovación educativa).
Entre los principales elementos que he destacado en mi conferencia han sido la necesidad de crear entornos educativos capaces de asumir la modernidad en la educación. Necesitamos implicar a los cuadros directivos en las organizaciones educativas y conseguir con ello comprometerlas en los verdaderos cambios. Solo así podremos pasar al siguiente paso que es ayudar al docente a ser mejor profesional dotándole de competencias educativas más modernas y actuales, más versátiles, más fluidas con el sentir del aula y con ello, un profesional capaz de ser mucho más situacional. Y por supuesto no hay cambio sin un proceso de mejora, y hablamos por lo tanto de más feedback al docente para ayudarle a verse desde otros prismas y conseguir una mejora en su rendimiento educativo. La mejora no viene solo del esfuerzo que tenemos de nuestros grandes profesionales, este esfuerzo debe ser dirigido hacia la mejora y hacia el continuo aprendizaje de cómo dar respuesta en el aula en cada momento. En este sentido el coaching educativo sirve como clara estrategia, igual que otras como el mentoring y otros sistemas innovadores, para conseguir cambios importantes y un mayor impacto en la mejora del aprendizaje de los alumnos. Nadie dijo que esto fuera fácil, pero que es lo más importante desde un punto de vista social seguro. Y es que la educación SI importa, y mucho…