Dice el ‘Financial Times’ que Zapatero o es muy valiente o es muy tonto. Para qué demonios leeré prensa extranjera si me dicen lo que en casa solo dice Rajoy y todos le llaman vende patrias. Si me quedara con eso y me limitara a leer los ingredientes de las cajas de cereales en griego, sería mucho más feliz.

Valiente o tonto. Se lo pregunta el ‘Financial Times’. Aaaay. Ay, Señor, que nos han ‘pilláo’. Éste es el de la conjunción astral que iba a causar sensación en todas las galaxias. Incluidas las que pueblan los universos paralelos. Para lelos. Ésas también. ¿Lo recuerdan? Lo dijo la que pone voz al audiolibro de Petete. Leire. Pajín. Ministra. Valiente o muy tonto. Uf.

No me repongo. De verdad. Lo estoy intentando y no. Se me ha quedado un mal cuerpo que no se puede aguantar. Ahora bien, la evidencia es evidente pero a estos tipos les he cogido una tirria solo comparable a la que debe de tenerles ahora mismo el propio Rubalcaba. Porque tengo que decir que me fastidia que unos tipejos desconocidos y supuestamente bien informados me toquen a mi Zapatero.

En esto pasa como con los padres y sus hijos. Ellos pueden reñirles y decirles que son unos vagos y que no estudian pero que no venga nadie de fuera a criticar a sus niños.

Aquí sucede lo mismo. Zapatero es Zapatero. Para qué decir más. Pero he de confesar que me ha molestado que venga nadie a decirme lo que ya sé, lo que ya sufro y lo que ya me gustaría a mí que no fuera.

Al ‘Times’ solo le falta decir que Zapatero es nuestro Don Quijote contra los mercados-molinos de viento. ¿Era tonto Alonso Quijano? No, señor. En absoluto. ¿Era valiente? Sin duda, aunque con su edad y sus armas, acabara en el suelo constantemente. El problema de don Quijote es que no hacía caso al bueno de Sancho que pisaba tierra y veía venir el fracaso. Y el de Zapatero es haber tenido a Sancho (Sevilla o Solbes) y haberlo mandado callado por no saber.