Resaca de San Juan
Quedan aún unos días y este año la resaca precede a la celebración de la noche de San Juan en nuestras playas. Resaca de noticias sobre si habrá verbena y suficientes medidas de seguridad y limpieza en una noche que parece invocar además de al verano a la exaltación de la juventud. Por eso ni todo el cúmulo de noticias agoreras por cautelosas que sean pueden empañar una de las noches más mágicas del año a pesar de lo exacerbado y excesivo de su carácter.
Pedir es gratis y por hacerlo aún no se cobra. Además ejercitar el optimismo y comenzar un nuevo ciclo es sano. A quién puede no gustarle una noche como la de San Juan. Tú ya estás eligiendo entre todos los rituales para reclamar a la felicidad que se mantenga cerca tuyo y de los tuyos. A ser posible. Ahora hay que documentarse y asesorarse acerca de cuál es el que más os conviene. Crees que conseguir lo que quieres depende casi solamente de ti. Pero por si acaso este año te has empapado de la chispa desprendida por el Informe Coca-Cola de la felicidad que ojeabas hace poco. Mientras los estudios científicos intentan adentrarse en qué nos da la felicidad continuáis invocando a no se sabe que fuerzas extrañas para todo lo que vale la pena. Curioso.
La Nit de San Joan, tan intangible y atávica no merece un plan tan analítico. Cualquiera que se haya acercado a una playa esa noche sabe que es mejor no serlo. Pero es que está la cosa muy mal y hay que sacar la calculadora hasta con los deseos. Si San Juan levantara la cabeza se sorprendería de la dimensión adquirida por la fiesta en su nombre probablemente tanto como Erasmo de Rotterdam viendo cómo muchos de sus aspirantes se recrean tal vez en exceso en plena época de exámenes. Finales además. Pero la concentración también necesita pausas para volver en sí.
Se acerca el momento de pedir un deseo al fuego purificador y echar a la mar para alejarlo todo aquello que resta energía. Pero no hay que desvelar más allá.Tampoco en las redes sociales. Alguien debería crear una aplicación informática para móviles y tabletas con que realizar sortilegios en su nombre -en diferido, sortilegio en diferido-, con compromiso de confidencialidad incluido. No se sabe cuántos deseos escritos en papel arderán junto al fuego y no se sabe cuántas cosas negativas se adentrarán en la mar para que la marea se las lleve, como viene sucediendo desde tiempos ha. Un ciclo nuevo llega con el alba tras les fogueres.