La red antisocial
Un encuentro inesperado y no precisamente alegre. Turbulencias, recuerdos lacerantes que deberían permanecer en el olvido, deudas no resueltas. Un o una ex, o el plasta de los seguros de ‘Atrapado en el tiempo‘ pueden ser dos ejemplos. Un vecino tostón también. Ese compañero de trabajo siempre tan inoportuno. ¿Se puede ser siempre impertinente? Él lo es. Situaciones incómodas todas ellas altamente voltaicas. Y evitables.
Eludir encontrarte con alguien es ahora muy sencillo. Te instalas Cloak y le das los nombres de tu lista negra. La aplicación -descubierta a través de Mar Monsoriu, experta en redes sociales-, te avisa de la presencia de tus contactos en un radio de proximidad determinado para que puedas esquivarles y evitar un encuentro inesperado. O no. Basado en el motor de localización de Foursquare e Instagram y disponible para iOS, Cloak se te antoja de un pragmatismo absoluto, así, de cuajo.
Contrariamente a lo que sucede en otras aplicaciones aquí impera la falta de buenrollismo. O la necesidad absoluta de él, según se mire. Hasta ahora se nos ha imbuido del deseo, de la moda, de la necesidad de ser social. Así pues se supone que hay que contar con un perfil público por infinidad de razones, tantas como personas. Y porque las empresas rastrean los perfiles de sus futuros empleados. Y no están los tiempos para prescindir de baza alguna. En cualquiera caso se supone que hay que saber manejarse con habilidad dentro de las redes y se supone tanto que a veces resulta impracticable además de agotador. No se puede congeniar con todo el mundo de la misma manera que no se tiene ganas de charlar siempre con todo el mundo.
Chris Baker, antiguo director creativo de Buzzfeed asegura que esta App se muestra como un reverso de sitios como Facebook, Twitter, Linkedin. En diálogo con el diario ‘The Washington Post‘, explicó creer que “ya hemos visto la cresta de las grandes redes sociales” y que “cosas como Facebook o Twitter son ascensores repletos donde estamos todos juntos apiñados. Las cosas antisociales están en alza. Verán más y más de este tipo de proyectos”.
No se trata de ir embozándose hasta las cejas con la capa, pero casi, casi tanto como si se tratase de la capa de invisibilidad de los juegos de Minecraft a fin de pasar desapercibidos. Así pues mejor no granjearse muchos enemigos para no tener que dar tanto rodeo aunque en el fondo puede que acabes echándolo de menos. Algo tan incómodo y literario como el encontronazo en vías de extinción. Una pena.