PORNOGRAFÍA

Manuel Arranz

Periférica

46 páginas

11 euros

‘Novela corta’, asegura la editorial que es este texto que, maquetado de otra manera, no pasa de cuento largo. O ni eso. Ni novela ni cuento. Más bien una congregación de apuntes, de citas, de historias a medio camino de llegar a alguna parte, si es que hay algún lugar donde termina una historia. Lo del título se entiende como una manera de decir ‘Desnudo’, pero adecuada a los tiempos actuales, más brutotes. El texto, sin embargo, es muy delicado. Ojo, que no hay una trama clara. El libro puede entenderse como un cuaderno de viaje, de viaje por la vida, un poemario desestructurado, reflexiones acerca de la madurez (el paso del tiempo se apodera de esas líneas vitales que se trazan y se dominan con decisión a los veinte o treinta años), de su propia familia (el padre con las monedas en el bolsillo), de personajes fronterizos como la loca Blancanieves, notas musicales, ideas sugeridas por Wittgenstein (durante todo el texto) o Pascal Quignard. Quizá sobre la idea de dos mundos (el de los felices y el de los infelices) gire buena parte de este ejercicio literario arriesgado y delicado que, si es porno, es porno del bueno. Ligero, interesante, con voluntad y espíritu. Quizá sabe a poco o quizá deja con ganas de más.

BURGUERA