La fiesta fallera vive momentos que o se analizan detalladamente o es para volverse locos. A vueltas aún con el boceto filtrado, una de las cuestiones que más se destacan de la falla grande es la dimensión mundial que va a dar la participación del artista urbano Okuda en el proyecto. Venimos de conseguir el reconocimiento de Patrimonio de la Humanidad a una fiesta por sus elementos característicos y resulta que el palo a la fiesta llega teniendo que recurrir a un artista inédito y forastero de las Fallas para tener que dar mayor dimensión a la fiesta Josefina. ¿No tiene suficiente valor el artista y diseñador fallero que hay que recurrir a gente externa? ¿Así potenciamos el valor propio de las Fallas? ¡Qué pena!
Veo a todo elemento próximo al poder muy contentos con la inclusión de Okuda en el proyecto de la falla municipal. Quizás tenemos artistas tan listos en Valencia que saben que haciendo un monumento burlesco sobre un proyecto de Calatrava y utilizando a artistas urbanos se van a llevar un concurso que nace viciado desde el momento el señor concejal decide quién va a decidir la falla municipal. Pensaba que el ‘SomPatrimoni’ tenía incluido al colectivo de artistas, pero resulta que tomamos decisiones como la de meter con calzador a dos grandes artistas como Latorre y Sanz en un proyecto que veremos cómo queda en plena plaza del Ayuntamiento.
![Falla municipal de Valencia para las Fallas 2018](https://static-blogs.lasprovincias.es/wp-content/uploads/sites/56/2017/05/fallagrande-210x300.jpg)
Falla municipal de Valencia para las Fallas 2018
Entiendo que la Concejalía de Cultura Festiva no tuvo bastante con la mofa a Manolo García y su equipo las fallas pasadas. Las críticas traspasaron la vareta y llegaron a faltas personales. Ahí pidieron respeto por el trabajo pero es que la fiesta fallara tiene un gran mundo de cloacas en el que la critica sin fundamento corre más que la pólvora. Entonces, meses después presentan al mundo fallero un proyecto rompedor, quizás más impactante que el de Manolo García, pero con la presencia de un artista que no es valenciano. Que no se entienda como una crítica a los que no son de la ‘terrena’ ni un menosprecio a Okuda. Es una simple reflexión de las justificaciones para presentar un proyecto.
Volviendo con la falla municipal. ¿Sale rentable tener unos monumentos que desde que está Compromís se han utilizado para cargar contra Fuset? Quizás tendríamos que recordar que los monumentos que se plantan en la plaza del Ayuntamiento no son exclusivos del mundo fallero, son la aportación del Ayuntamiento de Valencia para participar en la fiesta de las Fallas y en la que se incluye desde los que aman la fiesta hasta los que la odian con todas sus fuerzas.
No me gusta que se utilice el trabajo de los artistas falleros. “Aquí la gente viene sólo a ver volúmenes a partir de septiembre”, me comentó uno. Valencia, la Comunitat Valenciana, congrega quizás a los mejores diseñadores de fallas y la fiesta fallera es tan conocida en el mundo que ha sido merecedora de una etiqueta de Patrimonio de la Humanidad que sólo se utiliza con fines políticos por el cap i casal. Pese a ellos se elige un proyecto cuya justificación es la de “un artista internacional que facilitará una proyección internacional” (según reza en la nota oficial del Ayuntamiento de Valencia). Pues nada. Lo próximo será decir que queremos mucho a los pirotécnicos pero que traemos para la Nit del Foc a una empresa china o que las falleras mayores de Valencia desfilen en la Ofrenda al son de una banda americana. Total, buscamos que gente de fuera nos dé relevancia internacional como si las Fallas no tuvieran ya suficiente fuerza por si solas como para hacer que millones de personas vengan a Valencia en Fallas.