El diputado que se hizo pasar por pobre | Togado y hundido - Blogs lasprovincias.es >

Blogs

Rallo

Togado y hundido

El diputado que se hizo pasar por pobre


Intentar creerte el más listo de la clase tiene el riesgo de quedar como el más tonto. Vicente Ferrer, diputado nacional del PP, encaja en lo anterior. El aforado fue sorprendido ebrio al volante de su coche en Valencia. Fue el pasado mes de septiembre. Regresaba de una fiesta de cumpleaños. La imprudencia es grave. Pero no lo es menos que en esa situación -quizá no ahora- hace años, en los excesos de la juventud, muchos se han visto envueltos. Al día siguiente acude al juzgado de guardia. Se presenta frente al titular del juzgado de Instrucción número 19 de Valencia y el fiscal. Ferrer no es un hombre conocido para el gran público y su nombre y apellidos resultan de lo más común. Apenas sale en los medios. De hecho, en LAS PROVINCIAS sólo disponemos de una foto. Así que pasó desapercibido. Uno más de entre las numerosas alcoholemias que llegan tras los fines de semana. Tampoco él en ningún momento dijo: “Perdonen, soy diputado”. Calladito, estoy más guapo, se dijo a sí mismo. “A ver si salgo de este aprieto sin aparecer en los medios”, debió pensar. Pero los compañeros de Levante lo cazaron. Y ahí se le desmontó la paraeta. Al ser descubierto, la Fiscalía pidió que se revocara la sentencia al no ser competente el órgano que lo juzgó. Y así se hizo. La causa está ya en el Supremo. Su idea de no aparecer en los periódicos, finalmente le ha costado varias aperturas en páginas impares en buena parte de la prensa y algún que otro apunte en opinión. Y estos no precisamente glosando sus virtudes. Todavía le restará alguna otra aparición con la sentencia del Supremo. Para pretender mantener el anonimato, la estratageme le salió de lujo.   

La primera jugada le salió mal. Apostó todo al rojo y le salió el negro. Pero todavía siguió jugando. No terminó ahí el despropósito de Ferrer. El diputado recurrió a un abogado de oficio. Utilizar la asistencia jurídica gratuita para una persona que gana 60.000 euros al año. ¿Cómo se come esto? Esta es la pillería que lucen algunos de nuestros políticos. Y el hartazgo que inunda a la gente honrada. No cabe ni siquiera el desconocimiento. Ferrer es licenciado en Derecho y conoce el turno de oficio. El Colegio de Abogados le revocó el derecho al comprobar que sus ingresos sobrepasan con creces el máximo establecido en la ley. Ahora le tocará pagar el servicio prestado por el abogado quien, al parecer, también desconocía la identidad de Ferrer. Espero que le pase una buena facturita. Por listillo.   

 

@a_rallo en Twitter

Sobre el autor


febrero 2013
MTWTFSS
    123
45678910
11121314151617
18192021222324
25262728