JORDI. ¿POR QUÉ TE PORTAS MAL EN LA CÁRCEL?
Jordi es un nombre que suena mucho estos días. ¿Cuántos Jordi tenemos en la cárcel?
No es una pregunta de examen, aunque podría serlo; de hecho Jordis habrá bastantes, pero que suenen más parece que hay tres.
Dos muy recientes ligados a lo de Catalonia y para los cuales las manifestaciones de gentes empujadas por Omnium Cultural y ANC (Asamblea Nacional Catalana) piden su libertad y les colocan a estos presos el adjetivo de “políticos” lo que causa estupor en un lado y medallas en el otro por defenderse de la opresión, el fascismo etc. que lucen los españolistas.
Por lo visto parece olvidarse que la causa de su encarcelamiento es el de haber instigado a los manifestantes contra la Guardia Civil, en una acción de está cumpliendo las ordenes de una jueza.
De esos Jordis en la cárcel solo sabemos que uno había solicitado el cambio de celda o de modulo porque al pasar otro preso y saber que un Jordi era el independentista, le soltó un ¡Viva España! que partía el alma de los duros, que allí moran descansando de sus andanzas.
Un Jordi haciendo méritos para su potencial Republica Catalana en un “per si acas”. Yo lo comprendo. Es una oportunidad de adhesión y eso pueden ser puntos de cara a su carrera política.
Hay un tercer Jordi de apellido Pujol Ferrusola criado, al parecer, en la cómoda familia del que fue “molt honorable” y de cuya capacidad de restaurador de coches se hizo eco su mamá- conocida en los clanes bancarios andorranos como “la abadesa”.
El hacía milagros automovilísticos. Compraba barato y terminaba con un Ferrari y la mamá babeaba al ver su hijo tan hábil, estaba cegada por el amor maternal y no era para menos. Yo soy padre, no su padre, y me admiro y babeo también (me han dicho que esa baba no es por Jordi, sino por la misma edad, que aconseja un toque en plan botox que calma el epitelio . Me da miedo por si salgo con “morritos” Ana Obregón, un decir).
Como saben este Jordi está en el trullo por sus habilidades y me he enterado- lo he leído- que además de practicar el intercambio cultural con tarjetas de teléfono con otros presos, actividad prohibida, empieza a causar problemas cuando la televisión, comunitaria por cierto, salen news de Catalonia y exige con ,mando en plaza con modos descompuestos, cambiar a deportes.
Jordi “el mecánico sagaz” entra en modo cólera cuando no le hacen ni puto caso el resto de “angelitos” que le acompañan.
El nen no ha comprendido que el tiempo de trasladar bolsas de 500 pavos en el maletero ha concluido. Yo digo que ha concluido de momento.
¿Qué pasará si se declarase la Republica catalana? Una amnistía segura y algunas familias devenidas en modo “chorizos” saldrían brindando con cava y los Jordís coincidirían abrazándose como héroes ful.
No somos nada. Bueno, algunos sí. Estos Jordi merecen ser elevados a la categoría de héroes nacionales…en la provincia al Norte de Alcanar – Castellón.
De momento chupan cárcel. Veremos con el tiempo que pasa.