BALDOVÍ QUE TE VÍ
“Baldoví tararí, que te vi”. Demasiado largo para un titular, aunque se haya perdido la música de “tararí”, pero está claro.
Este maestro de Sueca, alcalde de su pueblo un día ha perdido el “esme”-el esme es como perder la compostura, la dirección de su conducta y eso que el diputado tiene experiencia llamémosla nacional.
Y ha sabido comportarse e incluso defender ciertos valores que yo sostengo.
Puede que nos encontremos con un Baldoví requemado por su fracaso como aspirante a presidir la Generalitat.
La fatiga o el orgullo personal, o la soberbia enriquecida por su estancia el Parlamento. ¡Quién sabe!
Y de repente surge la otra cara y se nos presenta como una suerte de matón de barrio que se levanta, rompiendo la dinámica del hemiciclo valenciano y encarándose a la portavoz de VOX- que puede gustar más o menos, pero que tiene la misma representatividad que “el Mestre d´escola” y erguido, con los brazos en tensión, las manos crispadas, reteniéndose, le espeta mirándola a la cara un “¿Y tú de que ríes?” la portavoz contesta con un “por que me da la gana” y a partir de ahí un cierto y general guirigay se impone en la casa de todos.
Creo que el asunto no procede solo del matonismo impreso en la genética del señor “Baldoví tararí que te vi”, sino de la deriva, en los últimos tiempos, del parlamentarismo como espejo en el que mirarse y del que copiar el estilo y contenido de las intervenciones, de no hace demasiado tiempo y al que podríamos llamar contemporáneo.
Sus señorías en general han perdido el “esme” hace años.
Ese ejemplo da pie, supongo, a aquellos que hoy son jóvenes que creen que todo está permitido.
Yo siempre he pensado que el tuteo implantado en su día por algunas organizaciones, como por ejemplo la Falange, ha derivado en la falta de respeto al mayor o al otro, o a la pérdida de modales cada vez más escasos.
Resuena en mi oído la voz, juvenil y cantarina, de una muchacha que trataba de ejercer de camarera al decirme a mi y a mi acompañante, ambos de provecta edad. “¿Habéis elegido ya chicos?” Sin comentarios. ¿No?