Un día como hoy
Hace 10 años
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¿Se chupa usted el dedo? Yo, de momento, no
2012 FEBRERO 26
por Carlos Pajuelo ¿SEGUIMOS IGUAL QUE HACE DIEZ AÑOS?
¿Se chupa usted el dedo?
“Pregúnteselo al administrador; yo no tomaba esas decisiones”. El imputado Iñaki Urdangarin se refugió ayer, HACE DIEZ AÑOS, repetidamente tras esa evasiva ante la insistencia del juez José Castro por conocer qué papel jugó el duque de Palma en la creación y gestión del entramado de sociedades empleado para desviar los fondos captados por el Instituto Nóos. (fuente: el confidencial)
Estoy preocupado por este asunto del “yo no sabía nada”. Al parecer de quien gasta la “guita” de otro para arriba nadie sabe nada. ¿Seguimos igual?
Es un fantasma que pulula por las oficinas siniestras de la corrupción y nadie lo ve. Solo deja algún rastro para comprarse casas y vivir de pm. Al tiempo de quejarse de cómo está la vida.
Es frecuente el “espolsarse” la responsabilidad diciendo “yo no sé nada”, no es mi responsabilidad”.
Coño si usted no se entera, no sabe, no conoce, no controla. Dígame pollo: ¿Para qué lo queremos? Es para mear y no echar gota.
Es el clásico “a mí que me registren”.
El jugador de balonmano hace un pase para atrás-abajo y se queda en blanco. O séase los dineros que venían cayendo como fruta madura hasta llenar el saquito lo suficiente para comprarse un casoplón, allende Barna, procedían del cielo.
Un ángel protector había tenido a bien constituirse en un “ángel de la guarda” para que el jugador, alto y bien parecido, – un muchachote honesto- no necesitase defender su honor por la vía del “mea culpa”.
Yo vengo en anunciarte que estás exento de toda culpa y, en todo caso, el plebeyo de tu administrador será quien asuma el “embolao”.
¿Un plebeyo que funciones tiene? Asumir, dejarse, no discutir, ceder lo que “siga menester”, digo yo, a la vista del cariz del asunto.
Estaba pensando yo que ya que vino ayer por aquí la Sra. Mato y anunció “un detalle-ayuda” para familias numerosas, que le den a este señor para que vaya a un centro de aprendizaje y le enseñen “a enterarse” y luego que nos explique qué ha pasado.
Entretanto me quedo en el limbo del sí o del no.
Han pasado diez años y este señor ya está en la calle paseando con quien quiere y puede y nosotros, los medios de comunicación “rosas o no” seguimos dándole cancha. ¿Es morbo?