Parecía que se iban a comer el mundo. Incluso se hicieron con importantes premios, entre ellos algún que otro Oscar. Pero la historia no perdona y pone a cada uno en el lugar que le corresponde. ¿Quién se acuerda ahora de películas como ‘Moonlight‘? ¿Será el destino de ‘La forma del agua‘?A las puertas de los Oscars, ‘La forma del agua’ de Guillermo del Toro, con 13 nominaciones, sopesa sus opciones. Pese a decepciones como los Bafta, en los que ‘Tres anuncios en las afueras‘ se ha impuesto con claridad, es la clara favorita. Falta saber si la reciente acusación de plagio mermará sus posibilidades. En cualquier caso, cuenta con el apoyo de crítica y público. Si estos premios se dieran en España, no habría dudas. Pero, ¿estamos ante una gran película, de las que hacen historia? ¿es tan buena o estamos ante una gigantesca campaña de publicidad ante su estreno en España?
No he visto aún la película y no puedo dar mi opinión. Pero ante tanta unanimidad tiendo a mirar a casos similares en el pasado y que el tiempo se ha encargado de poner en su lugar. A continuación cuento la trayectoria de algunas películas, recientes, no hay que remontarse demasiado en el tiempo, que en su momento concitaron la práctica unanimidad y que ahora han caído en el olvido.
The artist, 2011
Fue la sensación de los Oscar de 2012 con cinco estatuillas, entre ellas las de mejor película, director y actor. La película no pasa de ser un agradable pasatiempo a los que la maquinaria y el talento de los hermanos Weinstein catapultaron hasta el olimpo del cine. Rodada en blanco y negro y sin diálogos, no carece de encanto, pero tanto premio le viene un poco grande. También hay que tener en cuenta que ese año no fue demasiado bueno para el cine.
Moonlight, 2016
¿Quién recuerda un sólo fotograma de esta producción? Probablemente pasará a la historia del cine por la confusión originada en la ceremonia de entrega de los Oscar. La historia de Chiron emociona, es muy humana, llega al corazón. Pero no es mejor película que ‘La, la land‘ y creo que el premio es más que cuestionable. No es una película con méritos para resistir el paso del tiempo, como se ha demostrado en los últimos doce meses.
El paciente inglés, 1996
La película de Anthony Minghella se llevó nueve estatuillas de la Academia, un triunfo sin paliativos. Fue también el año de ‘Fargo‘ de los hermanos Ethan y Joel Coen. ¿Cuál de las dos películas ha soportado mejor el paso del tiempo? La respuesta es evidente. Por cierto, en esta película Frances McDormand ganó su primer Oscar y ahora opta de nuevo por ‘Tres anuncios en las afuertas‘. Mientras que la considerada por algunos la ‘Casablanca‘ de los años 90, ha pasado sin ni gloria, la obra de los Coen es considerada como una película de culto y una de las mejores de la filmografía de estos dos cineastas norteamericanos.
En tierra hostil, 2008
Es una buena película, pero demasiado ruido para tan pocas nueces. Consiguió seis Oscar en 2009, incluidos el de mejor dirección y mejor película. Se trata de una producción bien hecha, con un fantástico ritmo de thriller y momentos especialmente intensos. Ahora bien, ¿es merecedora de tantos Oscar? Hay que decir que tampoco fue un año demasiado bueno para el cine por lo que situada en su contexto puede que fuera el mejor trabajo del año, aunque no haya pasado a la historia. Kathryn Bigelow consiguió la estatuilla a la mejor dirección, un premio que quizá mereciera más con el ‘La noche más oscura‘, aunque en esa ocasión no se la llevó.
Slumdog millionaire, 2008
Fue la gran triunfadora de los Oscar en 2008. La película de Danny Boyle consiguió ocho estatuillas, incluyendo mejor película, mejor director y guión adaptado. Pasó por encima de oponentes de nivel como ‘El lector‘, ‘El curioso caso de Benjamin Button‘ o ‘El desafío de Frost contra Nixon‘. Una vez más se demostró el dispar criterio de la Academia de Hollywood, que parece no centrarse exclusivamente en los valores cinematográficos a la hora de otorgar sus premios. No es que ‘Slumdog millionaire‘, sea una mala película, pero la obra del director irlandés está sobredimensionada como el tiempo se ha encargado de demostrar.