#gastrosolidario1. Una quesería en ruanda

Desde que me puse el traje de superagente se me acumulan las emociones. Tanto que ya no se vivir sin ese delantal volador que me permite respirar limpio y sonreír en mitad de la selva. Mi vida como mister Cooking ha encontrado muchos y saborsos momentos, placeres imborrables. Pero entre ellos siempre tendrá un hueco inmenso haber conocido gente como a quién os traigo hoy. Pero no os lo traigo por él. Sino por esto otro…

Una quesería muy particular… y su gente

…unos campos de té negro y  su gente

Y una historia tremendamente hermosa.

EL SUEÑO DE UNA QUESERÍA EN RUANDA

¿VOLAMOS JUNTOS?

 A veces la vida te ofrece venturas como éstas: conocer a un tipo que un buen día dejó de trabajar para la ONU y decidió montarse su propia quesería en unos terrenos perdidos de Valladolid. Un lugar árido donde cuando llegas te sobrecoge el corazón porque lo único que ves en el horizonte es el sol al amanecer y un contundente atardecer cuando la luna se empeña en pedir paso.

Rubén Valbuena es de esos tipos que vale la pena descubrir y, si puedes, compartir momentos con él. Un tipo que esconde en su interior esas cosas que tanto apreciamos en los humanos y que se nos suelen escapar de las manos, metidos en los códigos que impone esa forma de vivir atroz, feroz, veloz… que marca los días. Un tipo honesto, que rezuma honradez, apasionado, talibán de lo artesano y, ante todo, creyente. Creyente de la verdad, de la sinceridad, del trabajo con lógica, de la coherencia.

(Rubén y la gente de la que vamos a hablar. A él, esto de salir no le va, pero… hoy toca)

Desde que un día aterrizó en Ramiro para montar su granja (con un nombre tan hermoso como el de Cantagrullas) hasta ahora, ha abanderado un minúsculo imperio de pequeños sueños queseros, agrupando a toda una red de compañeros. De artesanos convencidos, como él, que han puesto en valor ese producto tan maltratado por la industria alimentaria y que han logrado, a través de proyectos, campañas, ideas alocadas… dar a conocer lo que hacen. Quesos que tienen alma, aromas del monte que los abraza e historia de las manos que los acarician cuando llega la cuajada.

Cuento esto porque, hace ahora un año, descubrí que Rubén cogía un vuelo para ir a Kidaho. Un lugar de Ruanda en el que este quesero, emprendedor y, por encima de todo, batallador está ayudando a dar forma a una quesería gracias a un proyecto de la UE. Una quesería en la que enseña a crear a los lugareños productos como el lkivuguto (la leche fermentada local), la mantequilla ácida o quesos. Productos que elaboran con la poca leche excedente que queda de las pequeñas ganaderías familiares, de 2 a 4 cabezas por casa, que hay por todo el país.

Rubén volverá a ir hacia Ruanda en junio para optimizar el trabajo de la quesería y, a la vez, trasladar el modelo a otras pequeñas granjas del país. Será su quinto viaje y para esa ocasión quiere ir con un grupo de técnicos que permitan dar el empujón definitivo a la iniciativa. Para financiar el traslado han puesto en marcha la venta de té negro, té solidario, también ruandés. Unos botes que ofrecen vida y que venden en algunas tiendas o a través de la web de ‘Quesería Cultivo’.

¿Por qué te cuento todo esto? Porque estas cosas son las que me hacen creer en la gente. Las que hacen ver más allá de paraísos fiscales, de teatros políticos, de gaitas infernales… Esas cosas silenciadas que engrandecen la condición humana. Besos.

PRIMERA PARADA:

QUESERÍA BURERA DAIRY

Es el epicentro de toda la historia. El lugar donde fluye la dignidad. Donde entre quesos y mantequillas, a  través de las fotos de Rubén, uno descubre que está la esencia de la vida.

ÉSTE ES EL LUGAR:

ELLOS SON LOS PROTAGONISTAS:

Y ÉSTE ES EL RESULTADO:

SEGUNDA PARADA

LOS CAMPOS DE TÉ EN KIDAHO

Esta es la clave de todo. Un té ecológico, té negro, de la misma zona que debe ayudar a hacer posible el sueño de que las queserías de Ruanda sean productivas. Ayudar a que con ese te se logre formar a gente que sepa hacer quesos para poder vivir, y esto es final de la historia, con la dignidad que todos merecemos.

ESTA FOTO LO DICE TODO:

Más información y mejor, en este enlace.

Proyecto Cooperación en Ruanda

GRACIAS!!!!

Seguimos caminando juntos. Seguimos 🙂